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MAC COY de J. P. Gourmelen y A. H. Palacios

MAC COY Camerone -reseña-Dani

Esta semana disfrutaremos con una nueva reseña de Dani A. Díaz quien, para esta ocasión, nos comenta la novela gráfica MAC COY, de J. P. Gourmelen y A. H. Palacios. ¿La has leído?

MAC COY, de J. P. Gourmelen y A. H. Palacios

Reseña de Dani A. Díaz

MAC COY, UN PERSONAJE DE LEYENDA

En los años 80 se hicieron muy famosos unos cómics que tenían como protagonista a un oficial confederado que se embarcaba en los jalones históricos más renombrados de la época.

No los disfruté en su momento, pero nunca es tarde si la dicha es buena. Decidido a taponar una grieta imperdonable, me decanté por el volumen dedicado a una de mis batallas favoritas: CAMERONE.

Descubrí esta jornada épica gracias al libro “Sangre de valientes” de Carlos Roca, y desde ese momento quedó grabada a fuego en mi alma.

Posteriormente, profundicé en el tema con la obra “El mito de Camerone” de Joaquín Mañes Postigo e incluso escucho, con asiduidad, la canción que le dedicó Jean-Pax Méfret.

Los apasionados de la historia militar no se sentirán defraudados con el vibrante y didáctico guion de J. P. Gourmelen y las maravillosas ilustraciones de A. H. Palacios, un delicioso festín.

30 de abril de 1863

Las escasas 48 páginas, plenas de intensidad dramática, condensan los más célebres episodios del heroico 30 de abril de 1863, en el que 65 legionarios franceses combatieron hasta el exterminio frente a dos mil aguerridos mexicanos juaristas en el rancho o hacienda que da nombre a la batalla.

El combate

Así, se nos informa de…

  • el despliegue del puñado de valientes,
  • el error de no llenar las cantimploras en el vivaque,
  • la formación en cuadro en campo abierto frente a la caballería mexicana,
  • la huida de las mulas con los víveres y la munición,
  • el repliegue al bosquecillo de cactus y matorrales,
  • la carrera en busca de la protección de los muros de Camerone,
  • el sol abrasador,
  • el asedio infernal,
  • los ataques en oleadas,
  • el goteo incesante de bajas,
  • los sucesivos núcleos de resistencia,
  • el último baluarte en el cobertizo,
  • la carga desesperada a la bayoneta,
  • la caballerosidad de los mandos mexicanos perdonando la vida a los escasos supervivientes…

Todo ello con un sentido de la aventura, la épica y el drama que deja al lector sobrecogido.

Personajes

Por supuesto, desfilan los tres oficiales que alcanzaron la gloria eterna junto a sus soldados: el capitán Danjou (cuya mano de madera se saca cada aniversario en el cuartel general de la Legión Extranjera para rendir tributo a aquellos valientes), el teniente Vilain y el subteniente Maudet.

Y en el bando mexicano cobran protagonismo el coronel Millán y el comandante Talavera.

No se contentan con ello los creadores de este cómic imprescindible, sino que se apuntan los estragos que causa el vómito negro diezmando las filas francesas acantonadas en Veracruz. Las líneas de suministros, convoyes, puestos avanzados y amenazas del enemigo; y las maniobras, incursiones y raids del coronel de la contraguerrilla, Dupin, al mando de unos jinetes con chaquetillas rojas que alcanzaron renombre por su destreza.

Ilustraciones de A. H. Palacios

Al soberbio texto (insisto, magistral en su capacidad de condensar los actos más relevantes) se une la fuerza, el poder, el brío de unos dibujos que suponen una colección de estampas majestuosas, subrayando la situación desesperada de los asediados:

  • uniformes hechos jirones,
  • vendajes ensangrentados,
  • semblantes tensos y enloquecidos,
  • cadáveres en racimos,
  • paredes agujereadas por los disparos,
  • humaredas en las techumbres,
  • muros convertidos en amasijo de cascotes…

Se llega a sentir el sabor acre de la pólvora en la garganta, el estruendo de los cornetines, las descargas de fusilería, las órdenes a gritos, los ayes de los heridos y agonizantes, el retumbar de los cascos de los caballos.

Fort Apache

Para atemperar los ánimos, el volumen se inicia y cierra con unas alegres y desenfadadas escenas de baile en Fort Apache (homenaje, sin duda, a este tótem cinematográfico) con intercambio de parejas, rondas de ponche y confidencias entre los invitados.

No faltan, asimismo, referencias al origen confederado del gran protagonista de la colección, encuadrado en las filas del general Hood; un añadido que refuerza el mimo, el detalle, el rigor con el que se acomete este acercamiento a la época de la Guerra de Secesión y la inestabilidad política de México.

Los héroes de Camerone pueden estar orgullosos del tratamiento que les ha brindado la editorial Grijalbo-Dargaud, una auténtica joya para coleccionistas.

¡Bravo por los valientes, siempre en nuestra memoria!

Los autores

Texto: Jean-Pierre Gourmelen (Francia, 1934)

j_p_gourmelenTras estudiar derecho y bajo el ala de su inseparable amigo Claude Moliterni, emprendió una carrera como escritor y guionista de historietas, sobre todo de espionaje en un principio (Espions en blouses blanches) pero bajo seudónimo.

Después de una carrera militar comenzó a trabajar como guionista, ya firmando con su nombre en Nevada Hill, un cómic de vaqueros escrito para Guido Buzzelli con el fin de publicarlo en la revista Phénix en 1973.

A continuación de este primer libro comenzó a trabajar asiduamente en la revista Lucky Luke, desde marzo de 1974, asociado con el español Hernández Palacios, para dibujar las andanzas de Alexis Mac Coy, serie que gozó de gran éxito.

En 1977 creó para Laurent Vicomte al personaje Gus, que era una tira de prensa. En 1982 trabajó en el nuevo Charlie Mensuel con Lion Bret en la serie Krane le guerrier, que luego continuaron otros dibujantes. También fue autor este guionista de guiones de corte histórico, género que le gustaba, y en los años ochenta escribió los cómics biográficos Mac Arthur Bolívar.

Dibujos: Antonio Hernández Palacios (España, 1931)

Realiza sus estudios en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando, comienza a trabajar como dibujante litógrafoAntonio_Hernandez_Palacios pintando cartelones para las salas de cine. Sus primeros trabajos tras su licenciatura los realiza en la revista Chicos y en grandes carteles cinematográficos para la Empresa Chamartín y Cesáreo González.

A estos les seguirán Osborne, que le encarga la campaña del coñac Veterano, Domecq, Philips, Codorníu, Firestone, así como Roche y otros laboratorios farmacéuticos. Entra en el mercado americano con los dibujos publicitarios del coñac Independence, de Osborne, en colaboración con Salvador Dalí, cuyo rostro reproduce en el anuncio y los dibujos publicitarios de la cadena hotelera Meliá para España e Hispanoamérica.

También colabora en el semanario La Gaceta Ilustrada.

Viajes internacionales

A partir de 1952 comienza una serie de viajes internacionales, de los que cabe destacar el realizado a la República Dominicana, con motivo de la Feria de la Paz, para la realización de los murales con las aventuras de Don Quijote, por encargo de Ibergraf. Allí coincide con Vela Zanetti. Pero es en 1961 cuando comienza la creación de los famosos personajes que le acompañarán toda su vida. El primero es Doc Savage, para la editorial Rollán.

Manos Kelly

En 1970 y después de más de treinta años de publicidad, se le brinda la oportunidad de colaborar con la recién estrenada revista Trinca, de la editorial Doncel, para la que crea su personaje más querido: Manos Kelly, del que contará sus aventuras en una larga serie recogida en cinco libros. Su intención era desmitificar la historia del descubrimiento y conquista del Oeste, tal y como la contaban los cineastas americanos, que, para Palacios, ignoraban la contribución prestada a la misma por otros pueblos.

Esta publicación fue fundamental para la renovación del tebeo español y su gran acierto consistió en conferir a la historieta de aventuras encuadrada en el western unas raíces españolas, intención patriótica que repetiría después en las series de El Cid y La paga del soldado, conjunto de relatos de aventuras situados en la guerra de África y que comienza a publicar en 1973.

Mac Coy

En 1974 firma un contrato con la editorial francesa Dargaud, en la que nacerá su personaje más internacional: Mac Coy, protagonista de un western ambientado en la Guerra de Secesión norteamericana.

Por este personaje y su forma de entender el dibujo, Palacios recibe el premio Yellow Kid en Lucca (Italia) y el premio Phenix en París, máximos galardones de los profesionales del dibujo en Europa.

Datos del libro

MAC COY. Camerone

 

 

MAC COY Camerone

Jean-Pierre Gourmelen y Antonio Hernández Palacios

 

 

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